Caño frio
Ubicado al noreste de la península de Samaná se encuentra playa Rincón, declarada por la UNESCO como una de las diez playas más bonitas del mundo, este galardón fue otorgado por su naturaleza salvaje y por el poco impacto que el hombre ha ejercido sobre misma. En la parte izquierda de la playa podemos encontrar un pequeño oasis de agua dulce, este oasis que transcurre en forma de pequeño rio desemboca justo al final de la hermosa playa Rincón creando un autentico paraíso natural, los manglares acompañan al rio de nombre Caño Frio hasta la misma desembocadura creando un hábitat natural para muchas especies de peces que se refugian este la maraña de raíces que crean los manglares.
El principal atractivo de Caño Frio es la transparencia de sus aguas, tan translucidas y cristalinas que nos resulta difícil apreciar la profundidad real que tiene en rio.
Cada día es visitado por varias excursiones de turistas atraídos por la idea de poder darse un refrescante chapuzón en las frescas aguas del rio. Sobre la misma playa, podemos encontrar un pequeño restaurante de madera que atiende a los turistas que legan a esta parte de la playa, la especialidad de este restaurante es sin duda la langosta y el pescado, que desde bien temprano es capturado por los pescadores de la zona y vendido a este pequeño restaurante.
Este impresionante río de color esmeralda se transforma en una popular piscina natural donde se encuentra con el océano en el extremo oeste de Playa Rincón.
A los residentes y visitantes les encanta refrescarse aquí, antes o después de disfrutar de pescado y langosta fresca cocinados en fogones cercanos por múltiples vendedores de comida, lejos de las multitudes turísticas en el lado este de la playa. Aléjate del océano siguiendo el río, y terminarás en un bosque más denso, donde las aguas bordeadas de manglares del río Caño Frío se vuelven color turquesa, y aún más vivas y frescas. Pensarás que has encontrado el Jardín del Edén.